martes, febrero 06, 2007

"La vida es más pequeña que los sueños", dice Rosa Montero. Y es verdad: no nos alcanza la vida para crear lo que hemos soñado. Y eso se da en todas las parcelas del ser humano, hijos como somos de Hipnos y Nix, del Sueño y de la Noche. Cada ser humano es su propio Morfeo, que construye el porvenir como el lugar soñado. Y yo sueño cada día con este pueblecito encantado y de colores al sur del Bahía, en Brasil. Se llama Trancoso. Mis amigos lo saben porque allí, en ese lugar lejanísimo, encontré hace un par de años la libertad personal verdadera y sobre todo, la paz. Puede que parezca una contradicción absurda, porque soy urbana, vivo en plena Rambla frente a un supermercado, al lado de las oficinas bancarias y las tiendas, y dentro de poco pasará un hipermegamoderno tranvía que me tiene la cabeza mala. Al final uno se da cuenta de que soñar no cuesta nada, pero un billete de avión sí, y yo debería haber estado allí pasado mañana. ¿Las razones? Quizás reencontrarme con toda esa gente humilde que me dieron tantísimo cariño (me decían "la gringa" ¡a mí!) que me construyeron con sus manos un berimbao, collares de conchas y pipas de coco. Pero sobre todo, porque mi gran amigo Augusto Sevá también cumplirá un sueño y quería que estuviera a su lado apoyándolo. Por fin, y después de meses de muchísimo trabajo se estrena su película "Historias de Trancoso", filmada en el pueblo y con gente del pueblo, que cuenta la historia de unos adolescentes que asisten asustados al rápido desarrollo del pueblecito en los años 80. Habrá una pantalla gigante en El Cuadrado, estarán todos y será el gran estreno mundial de una película entrañable. Pero no puede ser, a pesar de que lo he intentado: estamos en tiempos de Carnaval y un pasaje desde aquí no baja de los 2 000 € (+2 000 que no tengo...jajaja) Pero ya iré. "El sueño es un arte poético involuntario", que decía Kant. Al final seguiremos soñando con los sitios donde quisiéramos estar, como ahora sueña mi hermana a la que sólo le digo: si quieres que tus sueños se hagan realidad ¡despierta!

1 comentario:

Anónimo dijo...

Suerte para esa hermosa película... y para toda la gente de Trancoso (que me recuerda Troncoso, la zona donde estaban los pres en el campo en Pinar del Río, jejeje... seguramente igual de intrincada, pero con menos pintura).