lunes, febrero 26, 2007

Miro estas fotos que me ha mandado mi amigo Augusto una y otra vez, y no dejo de pensar en aquel documental de Octavio Cortázar de 1967 "Por primera vez" en que un viejo camión llevaba a campesinos olvidadísimos las imágenes en movimiento de Charles Chaplin en "Tiempos Modernos". Ellos no salían de su asombro, se asomaban detrás de la pantalla y se les iluminaban las caras toscas y arrugadas. Nunca habían visto el cine. En Trancoso puede que no haya sido así: hay televisores, DVDs, videos.. pero ¡¡¡¡el cine!!!! Hace días conté que tal vez yo tendría que haber estado allí. Solamente tengo ganas de compartir el éxito de la película de Augusto, después de haberme dado un baño de buena música brasileña con Gilberto Gil en el Auditorio de Tenerife. Tal vez me cansé un poco: sólo con su guitarra casi dos horas no fue fácil. Pero él es el que ha hecho estas cosas posibles, que para eso es el Ministro de Cultura de Brasil. Felices los que pudieron estar arropándote, Augusto Sevá. ¿Por qué coño no consigo estar nunca donde quiero y debo estar? ¿Es el dinero? Supongo que sí. Feliz, Trancoso, tierra de mis corazones. Enhorabuena, meu gato velho. Sarabá, Trancoso do meus amores.!

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