domingo, febrero 18, 2007

He pasado dos días bastante jodidos, sin levantarme apenas de mi sofá con un problemita renal que me tenía hasta las narices. Ahora ya estoy mucho mejor, casi bien; gracias: yo también te quiero. En esos momentos en que tienes baja la moral, la salud, la autoestima y altos la fiebre y los decibelios carnavaleros, no sé por qué me sentí tan desamparada. Esa es la palabra justa: desamparo. Un par de días bastante espesos, de duerme-vela y zapping, escalofríos y sopitas de maíz con habichuelas. Lo que pasa es que hay alegrías enormes que ni mis estúpidos riñones pueden opacar por esa espesura: ayer supe de una amiga insustituíble de la que no tenía noticias desde hace casi 30 años. Silvana Bruera, gracias por escribirme. He sabido lo que haces -defender los derechos de la mujer en tu Uruguay no hay con qué pagarlo. Y cuando decido levantarme, quitarme la puñetera batica de casa y el moñito, darme un baño como dios manda y dejarme sueltas las pasas colorás, viene mi amiga Aytana con un regalo fabuloso: un disco de boleros que compuso Descemer Bueno para la voz incomparable de Fernando Álvarez, bolerista de la vieja escuela con unos arreglos espectaculares. Después me llama mi amigo Alfredo desde Paris, y me escribe mi hermanita. Pregunto: ¿se puede pedir más en un sólo día? Fue como una especie de "levántate y anda, Puchi, al fregadero, hija" Ya estoy en pie, ahora sí, amparada. ¿Viste qué fina soy con los reproches, mi escribidor? Jajaja

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Un besito en tus riñones carnavaleros. Me encantas de peluca negra y sonrisa amplia. Pue' na', a bailar bolero y a olvidar las penas.
Te quiero desde esta tu otra tierra que te espera.

Puchi en alguna parte dijo...

Tú como siempre, hada madrina. Gracias. Tendrías que haber estado en mi lista de ayer, pero por defecto horario, ya era tarde. Besos

Anónimo dijo...

Prefiero las descargas de tu casa, son más divertidas que los carnavales....